Durante la campaña electoral del 2018, todos los contendientes con un pragmatismo político, buscaban el voto y la conquista del poder a cualquier precio. Por lo cual vimos que todos los candidatos mostraron valores religiosos y que AMLO fué , el que no solamente hizo mayor cantidad de comentarios religiosos y morales, sino que también afilió a su partido ( Morena ) al Partido de Encuentro Social ( PES ), que como es publico y de todos conocido, es un partido de un conjunto de Iglesias Evangélicas.
Realidad que al concluir las elecciones con la victoria contundente de AMLO y con base a sus acciones y declaraciones ya como presidente ( Distribución de la Cartilla Moral – la Justicia y la Moral están por encima de la ley ) y las iniciativas presentadas por la bancada de su partido ( autorización a las iglesias para que tengan medios de televisión ), podemos y debemos hacernos la pregunta… ¿ está en peligro el Estado Laico ?
Pregunta que trataré de contestar con base a la información que he podido recabar en diversos artículos en periódicos de circulación nacional , en programas de análisis de varios canales de television y sobre todo en libros y artículos de Bernardo Barranco.
Si, si esta en peligro el Estado Laico, y su mayor amenaza la representa el gobierno de AMLO, todo esto porque él, está convencido que la sociedad requiere de valores religiosos para combatir la corrupción, la violencia y la inseguridad y que es tarea del estado moralizar al pueblo.
Su intención es presentarse como un humanista religioso, comentando varias veces que sus modelos no son, solamente Gandhi, Martin Luther King y Nelson Mandela, sino sobre todos ellos Jesucristo.
Aunque también se considera Juarista, da la impresión que no entiende plenamente el concepto de Estado Laico, porque en la práctica se manifiestan muchas contradicciones y ambigüedades. A veces parece que se le olvida que fué electo como presidente constitucional de un país laico y no como un líder o pastor de una religión.
En un Estado Laico, se supone que las creencias personales del presidente y de los servidores públicos,son irrelevantes porque no tiene permitido involucrarlas en la administración pública. La idea de separar las creencias personales de la función pública es central.
El problema surge cuando él, pretende difundir y en el fondo, quiéralo o no, imponer, al conjunto de la población, una visión religiosa y una visión moral. Los gobiernos civiles no deben tener religión porque siendo su deber proteger imparcialmente la libertad religiosa de todos los gobernados.Creo que con base a nuestra historia y cultura, a la mayoría de la gente no le gusta que las iglesias o agrupaciones religiosas y sus ministros de culto intervengan en política.
Parece que para AMLO el Estado laico de López Obrador se reduce a una simple neutralidad del Estado ante las religiones,olvidando elementos cruciales de su razón de ser, como la defensa de la libertad de conciencia, así como los mecanismos que ha generado para garantizarlos, defendiendo valores concretos como la libertad religiosa, pero también la igualdad y la no discriminación, los derechos de las minorías, la justicia social y muchos otros valores. La idea del Estado laico no es simplemente la de un actor pasivo frente a las religiones, sino la de un regulador de ellas en el espacio público.
Defendamos la vigencia del Estado Laico y nuestras libertades.
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